Dar clases de fotografía en FotoArte: una experiencia que me hizo crecer

Este año me tocó vivir algo nuevo: empecé a dar clases de fotografía en FotoArte, una escuela con muchos años de trayectoria que viene formando fotógrafos en todo el país.Y la verdad, fue una de las mejores cosas que me pasó en 2025.

Todo empezó justo cuando terminé un ciclo laboral en la liga de fútbol amateur donde venía trabajando. Ya venía con la idea de lanzar mis propios cursos porque siempre me gustó enseñar. Me encanta hablar de fotografía, podría hacerlo todo el día.

Y como suele pasar en estos casos, apareció la oportunidad justa: vi en redes un anuncio de FotoArte buscando docentes para Maldonado. Envié mi perfil, mi Instagram, y a los pocos días me escribió Magela, la directora. Tuvimos una charla, y de ahí en más, se abrieron muchas puertas.

Arranqué con talleres básicos (manejo de cámara, fotografía y video con celular, iluminación), y hoy estoy dando también los cursos integrales y profesionales en Montevideo, Ciudad de la Costa y Maldonado. Lo que más me sorprendió fue la estructura que tiene la escuela: muy bien pensada, con material de apoyo, práctica constante, y un equipo que está siempre dispuesto a dar una mano. Magela, Leti y Naty hacen que todo funcione de forma muy aceitada.

Algo que me encanta es que los alumnos no solo aprenden teoría, sino que tienen práctica real: trabajan con modelos, con productos, con marcas. Es una experiencia muy completa.

Pero lo que más me dio esta experiencia fue volver a conectar con lo básico. Explicar algo que aprendí hace años me obliga a repensarlo, a tenerlo fresco. Me desafía a buscar nuevas formas de enseñar, y me mantiene cerca de la fotografía todos los días.

En clase, más allá de lo técnico, trato de contar cómo aplico las cosas en el mundo real. Les hablo mucho desde mi experiencia en bodas, en eventos, en lo cotidiano. Me gusta también orientarlos con el tema de equipos: qué vale la pena comprar y qué no, para que no pierdan tiempo ni plata.

Además, a algunos alumnos que quieren meterse en el mundo de la fotografía social, les estoy dando la posibilidad de acompañarme a cubrir eventos como asistentes o segundas cámaras. Me parece una oportunidad que a mí me hubiese encantado tener cuando empecé. Ver cómo trabaja alguien en una boda, poder practicar en un evento real y empezar a armar portfolio… todo eso te acorta muchísimo el camino.

Sinceramente, no siento que sea un trabajo. Me gusta, me divierte, y cada clase me hace crecer. También me permitió estar presente como fotógrafo en eventos como el congreso Marketers Latam, lo cual fue otra linda experiencia.

A FotoArte solo puedo agradecerle. Me dieron una gran oportunidad, y estoy haciendo todo lo posible para estar a la altura.